Las cocinas abiertas al salón se han convertido en una tendencia en los últimos años. Es un concepto de cocina que aporta una nueva cara a la distribución del hogar y ofrece nuevas funcionalidades. Si quieres saber qué son las cocinas abiertas al salón, sus ventajas y posibles inconvenientes, así como algunas ideas, quédate leyendo.
¿Qué es una cocina abierta al salón?
Las cocinas abiertas al salón, también llamadas americanas, son aquellas que no están delimitadas por paredes, sino que se conectan directamente con el salón.
Al ser un espacio abierto donde se puede jugar con la distribución del mobiliario para crear un espacio totalmente diáfano o crear un punto diferenciador para crear la sensación de separación con algún elemento.
Ventajas de las cocinas abiertas al salón
Tener la cocina abierta con el salón ofrece algunas ventajas, sobre todo en hogares pequeños donde la falta de espacio puede resultar un problema. Además, las cocinas abiertas al salón dotan al espacio de más funcionalidad y comunicación entre las diferentes partes de la casa.
Aumenta la sensación de amplitud
Combinar un espacio abierto con cocina y salón aumenta la sensación de amplitud general. Al final, estás juntando dos estancias en una y, por tanto, obtienes un área mucho más extensa.
Eliminando las barreras que separan la cocina del salón, no solo consigue que recuperes el espacio físico que ocupaban la separación de pared, sino que además generas una percepción subjetiva de mayor amplitud. Como hemos comentado, este punto puede ser determinante en el caso de que tengas una vivienda pequeña, lo que puede ser una buena solución.
Luz natural, sí
La cocina a veces puede ser un espacio dónde entra poca luz natural si no tiene ventanas o las que tiene tienen un tamaño muy reducido. Al eliminar las paredes y conectarla con una estancia como el salón, que suele ser de las más luminosas por ser una zona de descanso y ocio, permite que la luz natural entre más fácilmente en la estancia y hace el ambiente más agradable.
Con la cocina abierta también circula el aire con mayor facilidad y se mantiene un ambiente más fresco en toda la estancia. Además, si tienes las ventanas de la cocina y del salón enfrentadas, podrás aprovechar la luz natural durante todas las horas del día.
Facilita las tareas
Las tareas que realizamos para las comidas, como poner la mesa, llevar la comida o retirar los platos, implica viajes entre la cocina y el salón. Al tener ambas estancias integradas, facilitamos la realización de estar tareas, ya que los desplazamientos son más sencillos y rápidos.
Ambiente social y familiar
Gran parte del tiempo los pasamos tanto en la cocina como en el salón. Sin embargo, si ambas tenemos estas estancias separadas, es fácil que los miembros de la familia o invitados pierdan la oportunidad de pasar más tiempo juntos.
Contar con un ambiente abierto tiene ventajas para ambos casos. Cuando recibas visitas, puedes seguir estando con ellas mientras cocinas o realizas viajes entre cocina y salón. Por otra parte, si tienes hijos, podrás seguir estando cerca de ellos mientras te encuentras en la cocina, pudiendo estar pendiente mientras juegan en el salón o ven la televisión.
Desventajas de las cocinas abiertas al salón
Aunque hemos mencionado las ventajas de tener una estancia conjunta, también tiene algunos inconvenientes que es importante considerar para poder anticiparse a ellos y encontrar soluciones.
Mayor sensación de desorden
La cocina es un espacio de trabajo y a veces puede ser todo un reto mantener el orden. Teniendo los dos espacios conectados, el desorden que podamos dejar en la cocina para ser recogido más tarde es visible de manera constante desde el salón y puede afectar a la comodidad del espacio. Por eso la limpieza y el orden es fundamental en una cocina abierta al salón, por lo que establecer la rutina de recoger la cocina inmediatamente después de su uso puede ser una buena solución, igual que añadir a la cocina un buen espacio de almacenaje para guardar y recoger los utensilios.
De la misma manera, si nuestro salón no está recogido, también generará la sensación de desorden y desorganización en el ambiente en general.
Mezcla de ruidos y olores
Si hay algo que es difícil evitar en estas estancias son los ruidos y los olores. El espacio abierto permitirá que los sonidos de la cocina sean compartidos en el salón y puede afectar a la comodidad general de las personas que se encuentren en el salón. Los sonidos y los olores que se desprenden durante la preparación de las comidas se difunden fácilmente sin las barreras físicas de separación.
Como solución efectiva a este problema, instalar una buena campana extractora será suficiente. De esta manera, se minimizarán los ruidos generados, y más si la campana es silenciosa, y los olores de las comidas que preparemos.
Ideas para cocinas abiertas al salón
Para poner tu cocina abierta al salón hay diferentes maneras de conseguirlo. A continuación te proponemos algunas de las más populares:
- Isla: Colocar una isla es una de las formas más comunes de lograr una cocina abierta. La isla te servirá como separación visual y además dota a todo el espacio de funcionalidad.
- Muro bajo: si prefieres una cocina semiabierta, un muro más bajo es una buena opción. Este tipo de estructura mantiene la continuidad con el salón y a la vez delimita de manera parcial ambos espacios.
- Elemento separador: puedes colocar un elemento que ejerza de separador entre espacios, como por ejemplo una barra con taburetes o un sofá.
- Mesa de comedor: la mesa de comedor puede ser el punto de separación que, además de delimitar, crea una transición natural entre cocina y salón.
- Decoración: puedes marcar la diferencia entre los espacios jugando con la decoración. Puedes optar por colocar suelos distintos en cada estancia o decorar la cocina y el salón con estilos muy diferenciados para delimitar la cocina y el salón.
Conclusión
Poner una cocina abierta al salón puede transformar por completo el ambiente de tu hogar. Para hacerlo recuerda que es importante que el espacio sea coherente y hay que pensar la distribución del mobiliario. Antes de abrir tu cocina al salón, valora si esta opción se ajusta a tus necesidades. Con una buena planificación podrás beneficiarte de las ventajas que te ofrece tener un espacio abierto y funcional.